Composición y características de las pinturas
Los componentes de la pintura se dispersionan en el proceso de fabricación. Las principales etapas de la fabricación (composición de las pinturas) de pinturas son:
- La mezcla del aglutinante y el disolvente, con o sin agregación de aditivos.
- La dispersión propiamente dicha o «molienda» de los pigmentos con el vehículo, aunque no existe rotura de ninguna partícula y se agregan los dispersantes adecuados al sistema.
- El ajuste de la formulación o, más comúnmente, el ajuste de color.
- Finalmente, el envasado.
La pintura líquida se aplica sobre las superficies mediante distintas técnicas.
El secado de la pintura líquida, una vez aplicada en el sustrato correspondiente, se realiza por tres mecanismos:
- Evaporación del disolvente: curado físico.
- Absorción, mediante los aceites secantes, del oxígeno atmosférico: curado químico.
- Reacción entre componentes del vehículo. Las cadenas poliméricas reaccionan con moléculas de reticulante o entreenlazantes.
Algunos conceptos relacionados con las pinturas son los siguientes:
– Vehículo = barniz.
– Disolvente = diluyente.
– Aglutinante = resina = ligante.
– Esmalte = pintura con disolvente muy volátil.
– Laca = pintura muy pigmentada con disolvente de fácil evaporación.
– Pintura plástica = pintura al agua con resina acrílica que, al evaporarse el disolvente, tiene propiedades similares a los plásticos.
– Pintura al temple = pintura al agua con aglutinante celulósico y, generalmente, con cargas y sin pigmentos.
En resumen, la pintura convencional líquida (también existe pintura en polvo) consta de vehículo y pigmento.
El vehículo está formado por el aglutinante (vehículo no volátil) y el disolvente o vehículo volátil.
Una vez seca, se forma la capa de película protectora o decorativa.
La pintura sin pigmento, únicamente con el vehículo, recibe el nombre de barniz o laca. Si una disolución de resina en un disolvente volátil se aplica a pistola o a brocha, cuando se evapora el disolvente, sólo queda una capa transparente con poca capacidad protectora y de débil adherencia. A veces, la evaporación del disolvente se realiza a elevada temperatura, es lo que se denomina barniz al fuego.
Los barnices no tienen carácter inhibidor ni ejercen ningún tipo de protección catódica; su acción protectora contra la corrosión se limita al efecto barrera.